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Tribut (Petit Celler)

  • Foto del escritor: vinotecasbarcelona
    vinotecasbarcelona
  • 28 sept 2018
  • 3 Min. de lectura

Actualizado: 3 oct 2018

Nombre: Tribut by El Petit Celler

Dirección: Carrer de Beethoven, 8, 08021 Barcelona

Redes sociales: Instagram Facebook


El Petit Celler fue una apuesta personal de Sebastià Lozano que comenzó con una tienda de 20 metros cuadrados y ahora distribuye a toda la provincia de Barcelona.


La antigua tienda de vinos El Petit Celler renovó totalmente sus instalaciones en Barcelona y en su lugar se ha diseñado una vermutería a la entrada (Tribut), donde se servirán conservas de La Cala, firma creada por Albert Adrià, junto a una selección de 30 vermuts.


También cuenta con dos salas privadas en las que se podrán hacer tanto catas personalizadas como cenas o comidas privadas.


La carta de vinos del local parece un libro, diseñada por varios profesionales y contiene unas 250 referencias a copas. Una carta que, a propósito, está dividida en vinos tranquilos -con representación de D.O de España y Cataluña-; y vinos generosos.


En ella, destacar los vinos catalanes (especialidad de la casa), resto de España (Bierzo, Rioja, Ribera del Duero) y algunas joyas de países referentes para la viticultura de hoy (clásicos, como Francia e Italia; como el Nuevo Mundo, Australia y Nueva Zelanda, entre otros).


También si a alguien le apetece algo diferente de la carta se podrán degustar todos los vinos que la empresa tiene en el portfolio de distribución (más de 3.000) pagando el precio de tienda más el descorche (6€).


Los precios de las copas son proporcionales al precio de cada botella, precios que van desde tres euros hasta los 200 € por una copa.


Los mejores vinos se guardan en la “caja fuerte” del establecimiento, un rincón donde están las botellas más deseadas y que se llama así porque en su día fue la auténtica caja acorazada de la sucursal bancaria que había antes en el local y de la que aún se puede ver la puerta blindada.


Aquí se puede degustar una cata vertical de 8 añadas de Vega Sicilia o vinos emblemáticos de Cataluña de Bodegas Torres como el Gran Muralles. Todo dependerá de lo que el cliente quiera gastarse. Las botellas como Pingus , Château Latour, Château Cheval Blanc, L'Ermita o el Château Mouton Rothschild una vez abiertas se podrán mantener perfectamente por el uso del Coravin, una herramienta indispensable en los bares de vinos a copas que permite extraer el contenido sin necesidad de descorchar la botella y manteniendo sus propiedades intactas durante aproximadamente un año.


Se ha diseñado un espacio con un ambiente chillout junto a la caja fuerte llena con los vinos más exclusivos del mundo para ocasiones especiales, donde los vinos se podrán acompañar con jamón y embutidos de Joselito, atún de Balfegó, salmón ahumado de Carpier, ostras francesas y una selección de quesos artesanos, lo que más apetezca en cada momento…


Pero si lo que se quiere es acercar el vino al consumidor final, es indispensable contar con un buen sumiller. Por eso, será Bernat Martínez, sumiller de algunos de los mejores restaurantes como el Bravo o el Àbac, el encargado de transportarnos al universo vitivinícola que hará que deseemos todos los vinos de la carta.


El otro punto que llama la atención es la selección de cristalería de que disponen: 12 modelos de copas de los dos mejores fabricantes, Riedel y Zalto. Parece increíble como un mismo vino servido en dos copas diferentes cambia los matices y la manera de disfrutar.


Opinión

Decir que es un bar de vinos “caro” o “para pijos” como he leído en algunos foros creo que no se ajusta a la realidad. Es verdad que tiene vinos que se consideran de sibaritas, pero tienes muchísimos otros bastante asequibles y que cualquier persona amante del vino puede degustar. Yo he visitado muchas vinotecas y creo que puedo decir que, de calle, es la mejor en la que he estado, por cantidad de vinos y calidad. Y encontrar una vinoteca con vinos reserva a copas en Barcelona (y no digamos en el resto de España) es una tarea prácticamente imposible. Conozco algunas, pero los precios de las copas en general son muy altos ya que, este tipo de vinos, tienen “poca salida”, pongas donde pongas el local. La única vinoteca en la que he estado que se le acerca en cantidad de vinos que puedes probar a copas está muy lejos de aquí… La Enoteca di Greve (en Greve in Chianti) donde tienes más de 250 vinos a copas…


Quizás un poco corto el apartado de “maridaje” ya que la oferta es un pelín escasa.

La atención, por lo menos en nuestra visita, fue exquisita, lo que llevó a que adquiriera un par de botellas que no entraban en mis planes –había ido a buscar unas en concreto, y eso se debe al buen hacer del personal que trabaja en el local.





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